viernes, 24 de marzo de 2017

Argentina: 24 de marzo, marcha hacia Plaza de Mayo. La consigna será "Son 30.000. Fue genocidio" // Loza: "Fue el poder económico el que armó este brazo para producir las desapariciones" // Giuliani: "A la embestida del poder dominante se le opondrá la fuerza del pueblo organizado" // Trabajadoras y Trabajadores de Télam homenajearon a Rodolfo Walsh // Una marcha para frenar los retrocesos // Claudia Korol: "Es evidente que las acciones del gobierno intentan borrar en nuestra conciencia colectiva lo que significó el genocidio" // Uruguay: El Serpaj rechazó el decreto firmado por Vázquez contra los piquetes // Malestar en el Frente con decreto antipiquetes


Argentina: 24 de marzo, marcha hacia Plaza de Mayo. La consigna será "Son 30.000. Fue genocidio"

ANRed

23 de marzo de 2017

Marcha a 41 años del último golpe de Estado



El viernes 24 de marzo, en un nuevo aniversario del golpe cívico-eclesiástico-militar de 1976, el Encuentro Memoria Verdad y Justicia convoca a una concentración en Congreso a las 13:00hs, donde se desarrollarán actividades culturales y habrá una radio abierta de la Red Nacional de Medios Alternativos. A las 15:00hs comenzará la marcha hacia Plaza de Mayo. La consigna de la jornada será "Son 30.000. Fue genocidio". Por ANRed.

El próximo viernes, a 41 años del último golpe de Estado, el Encuentro Memoria Verdad y Justicia (EMVyJ) iniciará la jornada a partir de las 13:00hs con actividades culturales que tendrán lugar sobre la Av. de Mayo, entre Salta y el Congreso. Entre otros, participarán el Movimiento de Murgas Independientes y el Colectivo Fin de Un Mundo. Asimismo habrá Radio Abierta a cargo de la Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA).
A las 15:00hs comenzará la marcha hacia Plaza de Mayo, donde se prevé llegar alrededor de las 16:30hs.
Este año la consigna será "Son 30.000. Fue genocidio", en clara respuesta a los dichos de varios funcionarios del actual gobierno y del propio Presidente. En agosto del año pasado, Mauricio Macri calificó de "guerra sucia" a la última dictadura, al tiempo que afirmó que "no" tenía "idea si fueron 9.000 o 30.000" los desaparecidos porque, señaló, "es una discusión que no tiene sentido". En enero de este año, la última provocación pública por parte de un funcionario de Cambiemos fueron los dichos Juan José Gómez Centurión. El actual titular de la aduana y ex carapintada negó que se haya desplegado un plan genocida y la existencia de 30.000 desaparecidos: "8.000 verdades, 22.000 mentiras", sostuvo.
En aquel momento, el EMVyJ remarcó: "no reconocer el carácter genocida de la dictadura y su consecuencia de 30.000 compañeros detenidos-desaparecidos para implantar un modelo económico y social, a favor de los grandes monopolios y grupos de poder se ha convertido en una necesidad para este gobierno que pretende despojar a nuestro pueblo de sus organizaciones sociales y gremiales".
El gobierno de Cambiemos también intentó que el 24 de marzo fuese feriado movible, pero -tras el repudio de gran parte de la sociedad y de los organismos de Derechos Humanos- Macri tuvo que dar marcha atrás.
Las otras consignas que acompañarán la jornada serán:
- Contra la Impunidad de Ayer y de Hoy
- No al ajuste, la entrega y represión de Macri y los Gobernadores
- Perpetua a Milani. Cárcel a todos los Genocidas

Información relacionada: Campaña de difusión: El 24 de marzo "Yo Marcho con el Encuentro"





Son 30 mil y fue un genocidio
Margarita Noia: “No tenemos que permitir que nos venzan, tenemos mucho por lo que luchar”
Viernes 24 de marzo de 2017




La CTA Autónoma de Capital adhiere y convoca a participar este viernes 24 de marzo de la Movilización hacia la Plaza de Mayo, a 41 años de la última dictadura cívico-militar. La convocatoria será a las 13.00 horas en Avenida de Mayo y Sáenz Peña, para comenzar a marchar a las 15.00.
 “Esta marcha, además de para pedir como todos los años Memoria, Verdad y Justicia, es para refrendar que fueron 30 mil los compañeros detenidos-desaparecidos; que fue un genocidio, y que es para reafirmar lo que venimos diciendo desde hace 41 años, que no nos reconciliamos. Ya el Gobierno anterior miró en una etapa a ver si podía meter la reconciliación, por suerte en ese momento todos reaccionamos a tiempo y no fue posible, así que a este Gobierno hay que hacérselo saber también, claramente llenando la Plaza de Mayo”, afirmó Margarita Noia, Secretaria de Derechos Humanos de la CTA Autónoma de Capital.
“Este viernes 24 de marzo la CTA Capital va a concentrar a las 13 horas en la esquina de Saénz Peña y Avenida de Mayo, donde estaremos acompañando a distintas expresiones culturales hasta las 15.00, momento en que empezaremos a marchar, tratando de poder estar en el escenario a las 16.30 y a las 17.00 leyendo el documento”, detalló la compañera.
Y además agregó: “La CTA es fundamental, porque fue la primera Central de Trabajadores que participó y estuvo presente desde un comienzo en estas marchas”.
Por último, Margarita Noia expresó: “Cuando nosotros decimos ‘Nunca Más’ es nunca más a los golpes, nunca más a la persecución de trabajadores -porque la mayoría de los detenidos y desaparecidos eran trabajadores- porque cuando rompen la organización de los trabajadores es solo cuando logran vencernos, y nosotros no tenemos que permitir que nos venzan, tenemos mucho por lo que luchar”.
Fuente: www.ctacapital.org


Son 30 mil y fue un genocidio
Peidro: "El pueblo va a impedir cualquier intento de retroceso en las conquistas democráticas"

Viernes 24 de marzo de 2017, por Miguel Aguirre *



El 2 de abril de 1976, Martínez de Hoz dio su primer discurso. Durante dos horas anunció a los argentinos los objetivos de la dictadura. Las primeras medidas fueron congelar los sueldos de los trabajadores que cayeron un 40%. También se eliminaron los controles sobre precios de los productos básicos de consumo masivo y se promovieron las importaciones con el claro fin de destruir la industria nacional. ACTA habló con Ricardo Peidro, Secretario General Adjunto de la CTA Autónoma y ex detenido-desaparecido durante la dictadura, sobre este nuevo aniversario del 24 de marzo. El dirigente dijo que "el pueblo va a impedir cualquier intento de retroceso en las conquistas democráticas" y llamó a movilizar a Plaza de Mayo. La Central concentra a las 13.30 en Avenida de Mayo y Sáenz Peña.
-¿Cuáles son las reivindicaciones que llevarán los trabajadores este 24 de marzo a Plaza de Mayo?
- Primero, creo que en este aniversario de la dictadura militar la movilización va a ser masiva, incluso creo que más que en los últimos años. Es algo que está en el ADN de nuestro pueblo y el contexto hace esperar que esto se refuerce. Esto no sólo por el repudio al golpe sino también en homenaje a aquellos compañeros cuyas vidas fueron arrebatadas por los genocidas. Nuestra consigna es muy clara: Son 30 mil y fue un genocidio.
-¿Qué opinión tenés sobre la política de derechos humanos del gobierno de Macri?
- Que es evidente que tiene que destruir lo conseguido por el pueblo en estos años. Tenemos que dar una respuesta contundente a la intención de los funcionarios y de los sectores más reaccionarios de nuestra sociedad en reescribir la historia y negar el genocidio. Con esta movilización vamos a demostrar que tenemos memoria y que el pueblo va a impedir cualquier intento de retroceso en las conquistas democráticas. Esto está afirmado en años de lucha, de esfuerzo de nuestros compañeros, de nuestra clase trabajadora y de nuestro pueblo en general. No nos van a poder doblegar.
-¿Cuál es la respuesta de la Central?
- La lucha por el respeto a los Derechos Humanos es constitutivo, está en nuestra identidad y reclamamos históricamente memoria, verdad y justicia. Exigimos cárcel común para los genocidas, militamos para que los juicios continúen de manera que se esclarezcan las responsabilidades y que haya condenas ejemplificadoras.
-¿Cuáles son las deudas pendientes de la democracia?
- La deuda pendiente es determinar las responsabilidades de los civiles que instigaron, financiaron o se beneficiaron con el golpe. Esta es sintéticamente la postura de la CTA. Pero además y junto a esto, seguimos sosteniendo las banderas históricas de nuestros compañeros asesinados por la dictadura. Queremos tener una vida digna, es decir, de gozar todas las garantías democráticas, tener un salario digno, educación, vivienda, salud. Todo lo que el gobierno vulnera todos los días.
En este sentido ha sido nuestro triunfo que estén algunos genocidas presos y seguir con los juicios. Pero es nuestro compromiso, a 41 años, ir detrás de la Justicia hasta que el último responsable del genocidio vaya preso. Nuestro homenaje a los compañeros caídos será hacer realidad el sueño que ellos perseguían.
La CTA se moviliza en todo el país y nosotros desde nuestro lugar marcharemos como cada año a Plaza de Mayo.
* Equipo de comunicación CTA Autónoma


Son 30 mil y fue un genocidio
Loza: "Fue el poder económico el que armó este brazo para producir las desapariciones"
Viernes 24 de marzo de 2017, por Inés Hayes, Melissa Zenobi *
En entrevista con ACTA, Carlos Loza, querellante en el megajuicio Esma se refirió al estado actual de los juicios, a la incansable lucha de los organismos de derechos humanos y de familiares y al plan económico de la dictadura que llevó a la desaparición de 30 mil compañeros y compañeras, en su gran mayoría integrantes de comisiones internas o cuerpos de delegados.
-¿Cuando hablamos de la causa Esma, es ex Esma o simplemente Esma?
- Para nosotros es Esma porque para nosotros sigue siendo un campo de concentración y como no hay ex Auswitch tampoco hay ex Esma. Además a éste es al único al que se le llama ex, al Vesubio, La Escuelita o a La Perla no se los llama así.
-Contanos en qué estado está la causa.
- Los juicios se siguen desarrollando a pesar de las presiones, estaban programados con anterioridad y la presión de los organismos de Derechos Humanos, los familiares, en cada lugar del país se están desarrollando y hay como 12 o 13 juicios en simultáneo. Hace poco terminó uno en Campo de Mayo.
Entre los más grandes que se están desarrollando está el de La Perla, en su etapa final. Comenzó otro de la unidad policial de Córdoba y el otro grande es el del Operativo Independencia y el de la Esma.
-¿Hay una intencionalidad política de frenarlos?
- Hay una fuerte presión para desactivarlos y también está lo que nosotros llamamos impunidad biológica que es el paso del tiempo, 41 años, hace que los acusados padezcan enfermedades o hayan fallecido pero eso no impide que los juicios deban desarrollarse. Son criminales y han estado 41 años impunes.
En el caso de la Esma se está dilatando muchísimo, estamos en la última etapa, la de los alegatos de las defensas. Queremos suponer que antes de la feria de invierno va a haber una sentencia. Son 789 casos de compañeros y han surgido como 200 casos nuevos. De los 68 procesados han quedado 54 porque algunos han fallecido y otros por problemas de salud han quedado desafectados.
-¿Detrás de todo estaba el plan económico?
- No es una situación homogénea, por ejemplo en Campo de Mayo donde existió el mayor centro de concentración, todavía no hemos podido lograr que se hagan causas por más casos. Se va por tramos, ya se va por el décimo tercer juicio de pocos casos con los mismos represores de siempre. Nosotros queremos dar un salto porque la responsabilidad primaria de todos estos crímenes reside en el poder económico. Fue el poder económico el que armó este brazo para producir las desapariciones de las comisiones internas, de delegados, centros de estudiantes, todos colectivos organizados fundamentalmente en las grandes empresas, el caso de Blaquier es un caso emblemático, pero también de la Ford y otros.
* Equipo de Comunicación de la CTA Autónoma


Son 30 mil y fue un genocidio
Giuliani: "A la embestida del poder dominante se le opondrá la fuerza del pueblo organizado"
Viernes 24 de marzo de 2017, por Inés Hayes *
Este 24 de marzo se cumplen 41 años del golpe de Estado más sangriento de la historia de nuestro país. La CTA Autónoma marchará de Ushuaia a La Quiaca por Memoria, Verdad y Justicia y porque no se retroceda en todo lo conseguido en estos años de democracia.
ACTA habló con el secretario de Relaciones Institucionales de la CTA Autónoma y ex detenido político durante la dictadura, Juan Carlos "Pipón" Giuliani, sobre el pasado y el presente de la organización de los trabajadores y trabajadoras.
-¿Cómo se organiza la CTA para recordar un nuevo aniversario del golpe del 76?
- La CTA Autónoma marchará este 24 de marzo en todo el país para renovar -como lo hacemos desde nuestra fundación- el reclamo de Memoria, Verdad y Justicia. Fue la lucha del pueblo, y en particular de los trabajadores y los organismos de derechos humanos, la que obligó a los militares a gobernar nuestro país por mucho menos tiempo que sus pares de Brasil, Uruguay y Chile; la que logró que por primera vez en la historia contemporánea los vencidos sentaran en el banquillo de los acusados y condenaran a los vencedores en el Juicio a las Juntas y que se derogaran las infames leyes de Obediencia Debida y Punto Final. La derrota en la Guerra de Malvinas precipitó la huida de los militares del poder. Pero hacía ya bastante tiempo -con los calamitosos resultados económicos, sociales, políticos y culturales a la vista-, que carecían de consenso social y nadaban en el mar del desprestigio. Resulta una simplificación histórica adjudicar al desastre de Malvinas la causa fundante y excluyente del cese de la dictadura y la reinstauración democrática. Implica, además, desconocer la innegable resistencia del pueblo a la tiranía oligárquico-militar.
-¿Qué logros se han obtenido desde el campo popular en relación a los juicios?
- La reciente detención del ex jefe del Ejército, general César Milani, acusado de delitos de lesa humanidad, es fruto de la lucha incansable de nuestro pueblo para que se haga justicia y no quede impune el genocidio. Y aunque los juicios avanzan con lentitud permitiendo que muchos de los criminales mueran antes de ser condenados o que varios de ellos gocen de prisión domiciliaria en lugar de estar en cárceles comunes, lo cierto es que todo lo que se ha hecho en estos últimos 33 años en materia de derechos humanos es resultado del inalterable compromiso popular en reconocer esa resistencia, rescatar la memoria de los 30 mil ausentes, que padecieron el martirologio por su identidad con un proyecto de liberación y por la convicción de que nunca más reinará la impunidad.
-A grandes rasgos, ¿cuáles son las políticas de derechos humanos de este Gobierno? ¿Se puede decir que se está retrocediendo?
- Desde que asumió, en diciembre de 2015, este gobierno de Macri se ha dedicado a denostar los valores que dan sustento a la causa de la defensa de los derechos humanos; ha avasallado los derechos y conquistas de los trabajadores y se ha propuesto blindar la impunidad que protege a las minorías del privilegio actuando como un abanderado del revanchismo patronal. Cada uno de esos intentos por tergiversar la historia, preñar de angustia el presente e hipotecar el futuro, ha encontrado –y seguirá encontrando- una fuerte y decidida resistencia de parte de nuestro pueblo. El Macrismo ha pretendido sucesivamente negar el genocidio de la dictadura cívico-militar reflotando la Teoría de los dos Demonios; cuestionar que hayan sido 30.000 militantes populares los detenidos-desaparecidos durante el terrorismo de Estado; y modificar el Feriado del 24 de Marzo, Día de la Memoria, por la Verdad y la Justicia. Claramente desde el poder se baja un discurso que pretende a retroceder el reloj de la historia, aunque la resistencia popular no se lo permite.
-Respecto del campo popular, ¿se puede decir que hay un fortalecimiento en relación a las luchas contra lo que fue el terrorismo de Estado?
- El campo popular está avisado de los intentos oportunistas de malversar el contenido de esta causa. Por eso, a la embestida del poder dominante se le opondrá la fuerza del pueblo organizado. Este 24 de Marzo, sin duda alguna, será escenario de una de las manifestaciones más imponentes de nuestro pueblo que llenará las calles y plazas de todo el país para seguir reivindicando el ideario por el que vivieron, militaron y murieron nuestros compañeros y para gritar bien fuerte que queremos una Patria para todos y que sin trabajadores no hay Patria.
-¿Entonces?
- Que el discurso oficial, los funcionarios del Gobierno y los plumíferos del régimen lo cuenten como quieran, pero para nosotros, los trabajadores, son 30 mil los detenidos-desaparecidos y fue un genocidio.
* Equipo de Comunicación de la CTA Autónoma


Son 30 mil y fue un genocidio
Marcha en Posadas contra la impunidad, el ajuste y la represión de ayer y de hoy
Viernes 24 de marzo de 2017, por Alicia Rivas Zelaya *
La concentración está prevista para las 9.00 en el Mástil Municipal en Posadas. La marcha pasará por los lugares que funcionaron como centros de detención y torturas. El cierre será con un acto con presencia de sobrevivientes, familiares de víctimas y referentes sociales, gremiales y partidarias.
La tradicional marcha del 24 de marzo convocada por movimientos sociales, centrales sindicales, organizaciones partidarias tendrá lugar este viernes a partir de las 9.00 en Posadas, Misiones.
La concentración se prevé en el Mástil Municipal para después marchar hacia los distintos lugares que fueron parte del aparato represivo del Estado que secuestro, torturo y asesinó durante esos años.
“Se acordó continuar con la tradición de realizar actos y acciones independientes de los gobiernos de turno, como expresión de la continuidad de la lucha popular, que en estos días se expresa en la lucha docente, en el reclamo de los trabajadores estatales, los desocupados, en el repudio de las múltiples formas de represión que vemos hoy a 41 años de aquel golpe”, destacó, desde la CTA-A, una de las convocantes de la marcha.
Las organizaciones convocantes destacaron la importancia de recordar esta fecha como un acto de memoria, reivindicando las banderas de los 30 mil desaparecidos, los cientos de miles de perseguidos y denunciando las consecuencias palpables hoy del modelo económico que se instauró con ese golpe.
“Esta marcha se da en un contexto de profundización del ajuste de Mauricio Macri, Hugo Pasalacqua, representantes directos de la oligarquía y el imperialismo que recaen sobre los trabajadores y los demás sectores populares”, apuntaron.
Son convocantes CTA-Autónoma de Misiones; CCC; ATE; Sindicato de Trabajadores de la Prensa y la Comunicación; Movimiento Patria Grande; Partido Unidad Popular; Partido de los Trabajadores y del Pueblo; PCR; FJP; La Poderosa-Misiones.
- Son 30.000 los desaparecidos.
- No olvidamos ni perdonamos.
- Cárcel a Milani y todos los genocidas.
* Secretaria de Comunicación y Difusión de la CTA Autónoma de Misiones


Son 30 mil y fue un genocidio
Convocatoria de la CTA Autónoma Santa Fe
Viernes 24 de marzo de 2017, por Corresponsalía Santa Fe *
A 41 años del golpe genocida, la CTA Autónoma participa y convoca a actividades en toda la Provincia de Santa Fe. En diversos puntos la Central reclamará por el respeto a los derechos humanos; por la continuidad de los juicios a todos los responsables de la dictadura cívico militar; por cárcel común, perpetua y efectiva a los genocidas; por la libertad a los y las presas políticas; contra la Ley Antiterrorista; y por el cese de los despidos, la represión y el ajuste, entre otros puntos.
Este aniversario del inicio de la última dictadura encuentra a la masa trabajadora fuertemente movilizada. Desde inicios de marzo, diversas protestas poblaron las calles del país y el 24 de marzo parece ser parte de ese enorme cauce de movilización unitaria. En consecuencia, se espera que este año sea más masivo que los anteriores, que ya de por sí sorprendieron por la enorme concurrencia de la población.
En un marco de ajuste, despidos, suspensiones, represión, parece continuar aquello que denunciara el periodista Rodolfo Walsh: la miseria planificada. Justamente se cumplen 40 años de aquel invaluable documento histórico que es la Carta Abierta de un Escritor a la Junta Militar, redactada por Walsh y publicada el 24 de Marzo de 1977 y que generaría la posterior persecución y desaparición del militante y periodista que supo entre otras cosas ser parte de la CGT de los Argentinos y fundador de Prensa Latina y Ancla. Por eso la CTA Autónoma Provincia de Santa Fe lanzó una campaña de Memoria y Difusión con la impresión de miles de ejemplares de la Carta Abierta a la Junta que circulan por toda la provincia.
La mayoría de los desaparecidos y desaparecidas eran delegados/as de base. La dictadura cívico-militar apuntó a ese segmento fundamental para el control de la clase obrera y el impedimento de desplegar la democracia sindical. Hoy, en menos del 13% de los establecimientos hay delegados obreros y esa falta de representación genera, ni más ni menos, pérdida de derechos que redunda en mayor ganancia para los poderosos de siempre.
Mucha lucha gestó el pueblo, lleno de valentía y convicción, para lograr que Argentina fuera señera a nivel internacional por poner en el banquillo a los genocidas. Pero sólo una porción de ellos ha recibido condena, el avance sobre la investigación de los responsables del sector empresario se dificulta más en el contexto actual y se multiplican los beneficios de prisión domiciliaria para los condenados. La CTA Autónoma sigue exigiendo cárcel común, perpetua y efectiva para todos los genocidas y reclama por la apertura y sostenimiento de las investigaciones que ponen el foco sobre los responsables militares, civiles y eclesiásticos.
Hay 30 mil razones para seguir marchando, luchando, construyendo fuerza popular organizada. Por eso la Central invita a las siguientes actividades en la Provincia:
#SantaFe: La CTA-A junto a la Multisectorial de Derechos Humanos, se movilizará desde las 10.00 horas, desde Plaza del Soldado a Plaza de Mayo, donde a las 10.30 horas se realizará el acto central “contra la corrupción y la impunidad de ayer y de hoy”.
#Rosario: La CTA concentra a las 16.30 horas en la esquina de Moreno y Santa Fe para sumarse a la masiva marcha.
#VillaConstitución: Vigilia en Plaza de la Constitución, desde las 21.00 horas del 23 de Marzo. Convoca ATE Villa Constitución.
Fuente: www.ctasantafe.org
* Equipo de Comunicación de la CTA Santa Fe


Son 30 mil y fue un genocidio
Trabajadoras y Trabajadores de Télam homenajearon a Rodolfo Walsh
Viernes 24 de marzo de 2017, por Prensa SIPREBA *
A continuación, compartimos el comunicado de la comisión Gremial interna de la Agencia Télam.
“Las trabajadoras y trabajadores de Télam realizaron un homenaje a la figura del militante revolucionario, escritor y periodista Rodolfo Walsh. El hall de la planta baja del edificio de Avenida Belgrano ahora lleva su nombre. La Comisión Gremial Interna del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBa) descubrió una placa alusiva en conmemoración con el 41er. aniversario del golpe cívico-militar y los 40 años del asesinato del escritor.
"La ceremonia se realizó en la Agencia con la participación de Taty Almeida, integrante de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora y madre de Alejandro Almeida, uno de los tres trabajadores de la Agencia detenidos-desaparecidos por el terrorismo de Estado. Célica Gómez y Héctor Jesús Ferreiros fueron los otros dos compañeros recordados.
También estuvieron en el acto el secretario General del Sipreba, Fernando "Tato" Dondero; el secretario de Derechos Humanos del sindicato, Tomás Eliaschev; y la académica Natalia Vinelli, autora de algunas de las investigaciones más exhaustivas sobre la obra de Walsh. También se hizo un reconocimiento a las compañeras desaparecidas en el período 76-83.
El escritor, asesinado el 25 de marzo de 1977, fue el protagonista de algunas de las experiencias más importantes de la historia periodística argentina; entre ellas, dirigió el Semanario de la CGT de los Argentinos, la agencia de noticias ANCLA y el proyecto Cadena Informativa. También fue corresponsal de Prensa Latina, la agencia fundada en 1959 por los líderes de la Revolución Cubana. Desde allí descifró un cable que contenía información encriptada sobre un desembarco armado en Playa Girón enviado por del gobierno estadounidense, que permitió al gobierno revolucionario prepararse en la resistencia a la invasión.
Como escritor y como periodista, Walsh es un exponente del periodismo documentado, riguroso, basado en el testimonio crudo, directo y atravesado por una narrativa poderosa, lejano al ideario liberal de las "dos campanas" que promueve la ficción de una neutralidad inalcanzable. Los trabajadores defendemos ese ejemplo y asumimos esa tradición en nuestra práctica periodística".
Fuente: www.sipreba.org
* Equipo de Comunicación del Sindicato de Prensa de Buenos Aires


Son 30 mil y fue un genocidio
Córdoba: El compromiso militante y sus representaciones en la narrativa periodística
Viernes 24 de marzo de 2017, por Corresponsalía Córdoba *
En el Centro de Documentación del Círculo Sindical de la Prensa y la Comunicación de Córdoba (Cispren-CTA) se realizó el martes por la noche la charla-debate en el marco de las actividades por la Semana de la Memoria.
“El terrorismo de Estado y sus continuidades. Historias de represión, memorias y represión", fueron los temas de análisis a partir de los libros escritos por los periodistas Alexis Oliva (Todo lo que el poder odia – Una Biografía de Viviana Avendaño (1985-2000) y Ana Mariani y Alejo Gómez Jacobo (La Perla. Historias y testimonios en un campo de concentración).
Los panelistas abrieron la charla en torno al compromiso militante, las memorias, sus representaciones y las narrativas periodísticas tras lo cual se generó un enriquecedor debate a partir del discurso del Gobierno de turno, concentrado en desmitificar las consecuencias del Terrorismo de Estado y en instalar un relato social sobre la supuesta existencia de dos demonios en el pasado y su continuidad en la actualidad.
En ese marco, los libros “La Perla. Historia y testimonios de un campo de concentración” y “Todo lo que el poder odia” son investigaciones que profundizan, a nivel macro y micro, la voracidad en Córdoba del terror estatal, ejemplificado con la existencia del centro clandestino más grande del interior del país, y con la historia particular de Viviana Avendaño, uno de los símbolos destruidos ayer y vueltos a erradicar hoy por un poder concentrado y negador de la historia.
La presentación de la actividad estuvo a cargo de la secretaria de Cultura del Cispren, Ximena Cabral, y contó con la asistencia del secretario General del gremio, Carlos Valduvino, entre otros integrantes de la Comisión Directiva, como así también compañeros de organizaciones de Derechos Humanos y estudiantes de Ciencias de la Comunicación.
Fuente: www.prensared.org.ar
* Equipo de Comunicación de la CTA Córdoba


Son 30 mil y fue un genocidio
Para que arranque el juicio de Ford
Jueves 23 de marzo de 2017, por Redacción *
La causa por la complicidad de directivos de Ford con delitos de lesa humanidad está lista para ser debatida desde 2014. En enero pasado sufrió una nueva suspensión. La Cámara de Casación Penal reclamó que se determine cuándo comenzará.
La Cámara Nacional de Casación Penal urgió al Tribunal Oral Federal 1 ((TOF) de San Martín a que fije “en lo inmediato” fecha de realización del juicio contra ex directivos de Ford imputados por el secuestro de 24 trabajadores de la planta de Pacheco, en el norte del Gran Buenos Aires, durante la dictadura. La causa está lista para ser debatida en juicio oral y público desde 2014. En enero pasado, el TOF 1 suspendió por segunda vez el debate, que iba a realizarse este mes. Junto con la Secretaría de Derechos Humanos, la querella que representa a los obreros presentó un recurso de reposición para pedir a los jueces que declinen la suspensión. Aún aguardan respuesta.
El representante de la querella, Tomás Ojea Quintana, calificó como “reprobable” la demora en el inicio del juicio y responsabilizó a la Justicia. “Un juicio que desde 2014 está en el tribunal para que se lleve a cabo es reprobable que aún no haya sucedido. Uno de los tres procesados ya falleció y las víctimas son gente de mucha edad y están muy enfermos, con lo cual es claro el impedimento de hacer justicia”, apuntó en diálogo con este diario.
En uno de sus pasajes, la resolución de la sala II de la Cámara de Casación que urgió a los jueces de San Martín a ponerle fecha al debate insistió en la misma línea que Ojea Quintana, al hacer hincapié en que en tres años el debate fue suspendido dos veces y “todavía las víctimas y los familiares de la causa siguen esperando ansiosamente un juicio”.
Los camaristas Pedro David, Ángela Ledesma y Alejandro Slokar resolvieron un recurso de amparo presentado por la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires a propósito de la segunda suspensión que el TOF 1 de San Martín realizó del debate, que debía haber comenzado el 14 de marzo pasado. Los camaristas rechazaron el recurso, pero urgieron al TOF 1 “a agilizar el trámite y realizar los debates en los distintos tramos elevados a juicio, originados en la causa Nº 4012 ‘Campo de Mayo’”, entre ellos el que investigó los crímenes de los que fueron víctimas trabajadores de la Ford.
En el mismo sentido, la Sala II recordó “la vocación aplicativa de lo dispuesto por esta Cámara en la Acordada Nº 1/12, en orden a la necesidad de realizar la justicia bajo resguardo del debido proceso, en el menor tiempo posible y teniendo en cuenta las características que revisten causas de lesa humanidad como la especie”.
Los hechos por los que están imputados ex directivos de Ford fueron denunciados incluso durante la vigencia de las leyes de impunidad y en 2002 el fiscal Félix Crous pidió la apertura de la causa, pero pasaron más de diez años hasta que la Justicia procesó a tres directivos, uno de los cuales falleció el año pasado sin ver el comienzo del juicio.
“El tribunal suspendió el juicio con argumentos no válidos”, apuntó Ojea Quintana. Cuando fijó el 14 de marzo como nueva fecha de inicio, tras la primera suspensión, “no dijo nada de los otros juicios que debía afrontar, ni las prisiones preventivas que debe atender, como expuso en enero cuando suspendió el de Ford”, continuó el abogado. “Este es un juicio que no puede esperar”, añadió.
En la causa se investigó el funcionamiento de un centro de detención clandestino dentro de la planta de Ford en Pacheco, uno de los casos emblemáticos de la responsabilidad empresarial en crímenes del terrorismo de Estado. Los secuestros en la Ford se produjeron por “oleadas” desde el 24 de marzo, se extendieron durante unos dos meses y abarcaron a delegados gremiales y otros trabajadores que, en su gran mayoría, pasaron por el “quincho” de la Ford y luego por un circuito represivo que incluía la comisaría de Tigre.
Fuente: Ailín Bullentini; pàgina 12


Detrás de la bandera de los desaparecidos en manos de integrantes de organismos de derechos humanos, avanzará hoy por avenida de Mayo, en primera línea, el Comité por la Libertad de Milagro Sala. Esa será una de las consigna centrales de la marcha de este 41 aniversario del último golpe de Estado. Lo seguirán las columnas sindicales, el movimiento obrero con protagonismo de las juventudes de la CGT, que también tuvo un lugar central el año pasado, tras las primeras olas de despidos del gobierno de Mauricio Macri. “El mismo plan económico, la misma lucha. Paremos la miseria planificada”, es la consigna principal de las Madres de Plaza de Mayo línea fundadora, Abuelas de Plaza de Mayo, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas e HIJOS (Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio). Se trata de un reclamo contra la reimplantación de un modelo de exclusión que perciben como continuador del impuesto por José Alfredo Martínez de Hoz y, a la vez, un homenaje al escritor y periodista Rodolfo Walsh, de cuyo secuestro se cumplen mañana 40 años. Otro de los mensajes importantes de la jornada es la reivindicación de los 30 mil desaparecidos y la reafirmación de que aquí se cometió un genocidio. Es la respuesta a la avanzada que quiere destruir los consensos sociales acerca de lo que significó el terrorismo de Estado, en un contexto de retiro del Estado del proceso de Memoria, Verdad y Justicia y cuando el país vuelve a ser convocado por los organismos internacionales defensores de los derechos humanos no ya como modelo, sino para rendir cuentas de detenidos políticos y de la criminalización de líderes sociales y gremiales. 
A un año y tres meses del gobierno de Cambiemos, las convocatorias de este 24 de marzo (Madres, Abuelas, Familiares e HIJOS convocan a las 14 a  Plaza de Mayo y organizaciones de izquierda y el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia a las 15 a Congreso) aparecen como respuesta a las políticas públicas del gobierno en el amplio campo de vulneración de derechos. También como un escenario que se afilia a las enormes movilizaciones de los últimos meses, pero que muestra una dinámica propia del movimiento de derechos humanos. Para algunos, hay un proceso que está instalado en la sociedad, que tiene muchos años, está consolidado y por eso no tiene marcha atrás. Pero también hay un movimiento que sale a la calle para sostener lo que hasta ahora parecía etapa superada pero ahora peligra: la institucionalización del proceso de justicia y las políticas públicas del Estado en ese área.   “Hay una sensación de vuelta a los primeros tiempos”, dice Jorge Auat, titular de la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad. “Cuando los organismos de derechos humanos vuelven a necesitar la calle para instalar un reclamo que parecía cerrado aparece una bisagra que habla de que cómo esto salió de la agenda del gobierno”. 
Ese diálogo entre el retraimiento del Estado y la calle, también en el campo de los derechos humanos, es una marca del presente. Pablo Llonto, del colectivo de abogados de lesa humanidad Mario Bosch, explica que allí hay un punto esperanzador. “Quieren joder, pero no pueden. Los juicios siguen. Las investigaciones siguen, hay más genocidas denunciandos, pistas para buscar desaparecidos y nietos. Es cierto que a todo esto quieren ponerle un pie encima, pero los intentos de quienes prueban distintas herramientas para frenar a los juicios, fracasan. Ya sea que se llame resistencia o por el mantenimiento firme de las familias, de los querellantes, de los periodistas, como aquella reacción de los trabajadores del diario La Nación cuando repudiaron el editorial que exigía el fin de los juicios. Las plazas, las marchas, las baldosas y las marcas que siguen haciéndose. Eso lo van a querer frenar, pero evidentemente no han podido”.
Episodios como la marcha atrás del Gobierno con el DNU que trasformaba el 24 de marzo en un feriado turístico parecen mostrar que hay ciertos grandes pisos de consensos que son aún más grandes de lo que se perciben. En eso piensa Gastón Chillier, director del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), cuando menciona la rebelión de intendentes, gobernadores y hasta de voces dentro de la propia alianza de gobierno. “En ese episodio se vio que hay muchos anticuerpos que generó el movimiento de derechos humanos, pero también toda la sociedad - dice– Hay pisos muy altos y consolidados de consenso de la sociedad argentina, pero también hay un reconocimiento de la comunidad internacional sobre Argentina por este proceso. Eso quedó muy claro para el propio gobierno el año pasado con la visita de Barack Obama cuando Macri tuvo que salir a las corridas a organizar una reunión con los organismos. La clase política también es consciente de eso” (ver página 4).

Para atrás 

Si una de los datos centrales del ciclo que concluyó en diciembre de 2015 fue el de un alineamiento de los tres poderes del Estado en el impulso de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia, lo que siguió es un franco retroceso. Las políticas públicas en esa línea salieron de la agenda, o en el mejor de los casos permanecen en estado marginal.
Entre diciembre 2015 y marzo de 2016, el Ejecutivo desmanteló el área de derechos humanos del Banco Central encargada de investigar el sistema financiero de la dictadura; las tres divisiones de la Dirección Nacional de Derechos Humanos del Ministerio de Seguridad: coordinación de huellas, el Grupo Especial de asistencia para casos de apropiación de niños y luego el área de asistencia a la Justicia en la investigación de documentos de Prefectura, Gendarmería y Policía, con aportes centrales en las causas judiciales como “vuelos de la muerte”. Los Equipos Especiales de Archivos de las Fuerzas Armadas del Ministerio de Defensa –con 10 de los 13 trabajadores originales– no se desarmaron pero no pudieron desclasificar un sólo fondo documental en 2016, no pudieron actualizar la página de archivos abiertos, no realizaron publicaciones ni difusión y no contaron con insumos mínimos para la digitalización de archivos. Los contratos de varios trabajadores vencen el 31 de marzo y aún no saben si continuarán. El desmantelamiento de las áreas de investigación tuvo correlatos. El expediente por la candidatura del Museo Sitio de Memoria ESMA a Patrimonio Histórico de la Humanidad de la Unesco estuvo en un cajón detenido entre febrero y octubre. El Ejecutivo no entregó partidas para la preservación del edificio ordenada por la justicia, dado que es prueba judicial. En el espacio de los juicios, la secretaría de Derechos Humanos mantuvo sus querellas en distintas causas, pero se retiró de algunos expedientes emblemáticos: impulsora de la causa Papel Prensa, dispuso no apelar la decisión del juez Julián Ercolini que sobreseyó a Héctor Magnetto, Ernestina Herrera de Noble y, entre otros, Bartolomé Mitre. Las primeras líneas del gobierno alentaron los arrestos domiciliario de represores que estaban detenidos en cárceles comunes. Se derogó el decreto que prohibió la atención de represores en los hospitales militares y volvió a habilitar la Unidad 34 de Campo de Mayo, ubicada en un predio del Ejército, considerado parte del sistema de cárceles especiales que años atrás provocaron la fuga de detenidos. El programa de protección de testigos quedó a cargo de un subteniente de Caballería del Ejército. Y hubo encuentros no difundidos de funcionarios con las asociaciones que piden impunidad para los represores.
También es cierto que a pedido de los organismos de derechos humanos el gobierno obtuvo el acceso a parte de los archivos de inteligencia de Estados Unidos cuyo análisis aún no arroja resultados significativos y archivos de Francia. Que la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi), creada durante el gobierno de Carlos Menem a instancias de Abuelas de Plaza de Mayo, continúa con su trabajo. Pero uno de los datos de mayor preocupación está en el plano del discurso. Con un presidente que habla de “guerra sucia” y al que nunca se le escuchó en público pronunciar la palabra “desaparecidos”. Con un regreso a conceptos pre Juicio a las Juntas. Con Darío Lopérfido y Juan José Gómez Centurión, dos funcionarios, como símbolos del intento de impugnar que la última dictadura planificó y ejecutó un plan sistemático de desaparición de personas y de apropiación de niños. Como puntas de lanza, junto con algunos comunicadores, de la tarea de desprestigiar a Madres, Abuelas y Familiares y otros referentes de organismos de derechos humanos, que son las voces que representan al país ante el mundo, una constante desde 1983 hasta hoy, más allá de cualquier gobierno. En esa línea, también se asienta el peso simbólico del desfile del 9 de Julio con los militares carapitandas. Escenas que suelen concluir con un funcionario que hace la exégesis del Presidente (o de otro funcionario) y corrige lo incorregible.  
“El negacionismo es la batalla cultural más importante de los próximos tiempos. Existe un mecanismo de des-historizar al servicio del presente: aquello aparece como una exacerbación de la grieta, un problema de intolerancia entre argentinos, cuando en realidad la dictadura no fue producto de la intolerancia sino una respuesta impiadosa del imperialismo para detener la avanzada de una lucha por otro país y otra región”, dice Adriana Taboada, de la Comisión de Familiares de Zona Norte. 

Antídotos

Uno dato de este año fue el cambio en la dinámica de comunicación entre actores del proceso de Memoria, Verdad y Justicia. La mesa de organismos de derechos humanos, con trece organizaciones, comenzó a reunirse el año pasado, primero mensualmente y luego semanalmente. Diseñaron una red de comunicación de correo para tener a mano mecanismos de consensos rápidos y respuestas inmediatas ante las malas noticias. Las y los abogados de las causas de lesa humanidad se organizaron en 2011 como colectivo, pero en 2016 comenzaron a organizar un modo de datar los retrocesos y presentaron por primera vez un informe a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para pedir una audiencia “ante el nuevo escenario político tras la asunción del nuevo gobierno nacional (en el que) se advierten algunas luces de alarma y preocupación que no pueden dejar de señalarse y corregirse”. También catorce autoridades de las secretarías de derechos humanos de distintas provincias generaron con un espacio para consensuar comunicados en clave de alerta. En ese universo, también puede pensarse al Comité por la Libertad de Milagro Sala, que nació en marzo de 2016 con un nombre que intentó situarla como detenida política y buscó pensarse como herramienta de comunicación en el escenario internacional. 
“Hay cuestiones simbólicas, como el desfile del 9 de julio, que al mismo tiempo reflejan las posiciones de lo que no se ve, que es una política de Estado que marque el rumbo sobre el proceso de Memoria, Justicia y Memoria. Pero ante esa falta, hay intersticios. No hay posición única en el Poder Ejecutivo. Y en ese sentido, el principal activo de estas políticas es el consenso social. Es la línea sobre la cual la sociedad argentina decidió trazarla y no retroceder”, asegura Chillier.


Dentro de la dimensión judicial hay que decir que los juicios siguen en marcha. Y continúa un proceso que expandió las fronteras temporales de la dictadura con condenas por crímenes previos a 1976, como en Mar del Plata. Concluyó el juicio del Plan Cóndor, que dictamino por primera vez a nivel jurídico la existencia de una asociación criminal entre los países de la región y concluyó el juicio de La Perla con 28 condenas a perpetua y una movilización histórica en las calles. También se condenó a Marcos Levin, primer empresario juzgado por su responsabilidad con la dictadura. Pero pese a los avances, los últimos años muestran también retrocesos pronunciados y preocupantes. La Cámara de Casación Penal anuló las condenas del juicio por la masacre de Capilla del Rosario en Catamarca con un fallo que justificó los crímenes con el regreso de la teoría de los excesos. Otra resolución suspendió un juicio oral ya en marcha Santiago del Estero en el que se juzgaban por primera vez a integrantes del poder judicial provincial.
  “Aparecen votos de jueces que absuelven e imponen miradas casi justificatorias del terrorismo de Estado o hasta criterios que en rigor responsabilizan a las víctimas en los crímenes que sufrieron. Se dio, por ejemplo, en el caso de la apropiación de Manuel Gonçalves, donde se responsabiliza a su madre”, dice Alan Iud, abogado de Abuelas de Plaza de Mayo.    La dimensión de la responsabilidad económica es la más atrasada. El juez Julián Ercolini ordeno el sobreseimiento de los imputados de Papel Prensa. En diciembre, además, se suspendió nuevamente el inicio del juicio por los trabajadores de la Ford, una investigación que se inició en 2003. La postergación llegó incluso luego de que un acuerdo de  la Cámara de Casación dispusiera que los jueces del Tribunal Oral Federal  1 de San Martín sigan exclusivamente las causas de lesa humanidad. Los jueces se pusieron en pie de guerra. Y ante la nueva presidencia dijeron que preferían seguir también con otros juicios. Esta semana, Casación les reclamó que pongan fecha de inicio del juicio. La jurisdicción es en este momento una de los más conflictivas: tiene  21 causas que esperan el juicio. 
  Los dos últimos informes de la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad, de diciembre y marzo, muestran una desaceleración de los juicios. Hubo menor cantidad de sentencias y por consiguiente de nuevos imputados sentenciados por año, mayor cantidad de excarcelaciones o de detenciones bajo la modalidad de arresto domiciliario, una tendencia notada en diciembre de 2016 que se profundiza a marzo de este año. La falta de jueces para abastecer tribunales en procesos que siguen activos porque cada juicio produce nuevas pruebas y nuevos imputados, ha generado además un cuello de botella con investigaciones más lentas. Actualmente son mas los imputados libres (1149) que los detenidos (1044). Entre los detenidos, el 48 por ciento (518) está en arresto domiciliario y otros 455 se encuentran en cárceles del servicio penitenciario federal o provincial.  
  Los juicios registraron una baja en los ritmos. En algunos casos por menos cantidad de audiencias o jornadas de menos horas, como ESMA Unificada, una megacausa que lleva cuatro años de debate en el que aún no se avisora fecha de sentencia. “Sólo el 25 por ciento de aquellos que han sido condenados (un total de 187) tienen al menos una de sus sentencias firme. En el caso de los absueltos, el porcentaje de firmes es 17 por ciento (13 imputados)”, indicó la Procuraduría en el informe. “Cabe señalar -agregó– que el desaceleramiento del proceso de justicia resulta particularmente preocupante pues, a medida que transcurre el tiempo, aumenta considerablemente el número de fallecidos, por tratarse de un proceso de justicia que está teniendo lugar a 40 años de los hechos, en el que la mayoría de los actores centrales (testigos, víctimas e imputados) tienen edad avanzada. Además del desaceleramiento del proceso de justicia, sigue siendo uno de los principales desafíos avanzar en la imputación penal de civiles que fueron responsables de delitos de lesa humanidad, en particular de empresarios y funcionarios judiciales”.
  El cuestionamiento alcanza también a los integrantes de una Corte que lideró un proceso de justicia modelo en el mundo y en 2008 creó la Comisión Interpoderes para monitorear y acelerar las causas. Pese a que existió una reunión en septiembre, la Comisión Intepoderes está praæticamente desactivada. Los jueces no generaron aún un programa para planificar el modo de continuar con los juicios, uno de los reclamos de los organismos. Ni aceleraron el ritmo de revisiones de sentencias. Recién esta semana, en vísperas de un nuevo aniversario del golpe de Estado, la Corte pidió a Casación un informe sobre el estado de los expedientes de lesa humanidad. Y confirmó dos sentencias. En ese contexto, también preocupa que hasta aquí, la más importante decisión de la nueva composición de la Corte respecto de las causas vinculadas a represores es un fallo que estrictamente no está vinculado con este universo de expedientes pero generó alarma entre abogados y especialistas en derechos humanos. Fue la resolución dictada en el caso Fontevecchia, en el que los jueces Ricardo Lorenzetti, Elena Higthon, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz aseguraron que los tribunales locales no están obligados a cumplir un fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Sólo Juan Carlos Maqueda respetó la jurisprudencia de esa misma Corte (con su anterior composición), que señalaba la responsabilidad internacional del Estado en materia de derechos humanos. El fallo fue leído en clave de Milagro Sala, ya que su detención está siendo impugnada por organismos internacionales, pero le sirvió de argumento al defensor de Santiago Omar Riveros, en el último juicio de San Martín, para pedir la anulación de todo el proceso, algo que no fue concedido por el tribunal.      
  “Es responsabilidad de la Corte evitar un escenario como el de 2007 y 2008, cuando el entonces juez de Casación Alfredo Bisordi frenaba todos los juicios. Una buena noticia fue que en el oficio que mandaron a Casación esta semana pidiendo informes firmaron los cinco jueces. Pero la Corte tiene que fijar los criterios y delimitar el alcance preciso de la actuación de Casación, revocando aquellos fallos donde se tomaron decisiones que estaban vedadas para ese tribunal, porque no eran materia de recursos. O revocando los fallos que fijen criterios que apunten a responsabilizar a las víctimas en vez de los victimarios, como es el caso de la masacre de Capilla del Rosario”, dice Iud.

Crónica de otra fuga


La película se llamó Crónica de una fuga, la dirigió Adrián Caetano, se estrenó en abril de 2006 y es la adaptación del libro Pase Libre, de Claudio Tamburrini, uno de los protagonistas del hecho. En ella se relataba la huida de Claudio y otros tres secuestrados de un centro clandestino de detención que funcionó en Morón y que se conoció con el nombre de La Mansión Seré. El film hizo famosa aquella fuga. Pero hubo otra. 
En la esquina porteña de Venancio Flores y Lacarra, frente a las vías del ferrocarril Sarmiento y a dos cuadras de la estación Floresta, funcionó entre mayo y noviembre de 1976 un centro clandestino por donde pasaron más de 300 detenidos. Conocido como Automotores Orletti, fue la base de operaciones del llamado Plan Cóndor, una estrategia de represión global que coordinaban las dictaduras de Argentina, Paraguay, Chile, Bolivia, Uruguay y Brasil.
En ese lugar el general Otto Paladino, entonces jefe de la SIDE, junto a la banda de la triple A liderada por Aníbal Gordon, Eduardo Ruffo y el general uruguayo Nino Gavazzo, secuestraron, torturaron, mataron y robaron todo lo que pudieron, hasta que un descuido y la audacia de dos militantes los sorprendió una mañana de noviembre de 1976.
Norma y José militaban en las FAL (Fuerzas Armadas de Liberación), una de las organizaciones políticas de izquierda que se fundó a fines de 1968.
Eran una pareja que tenía casi todo en común, hasta el barrio donde habían crecido. Los dos eran de Avellaneda, pero ella hincha de Racing y él de Independiente, diferencia que los unía en la pasión futbolera y en las bromas después de cada partido, festejando triunfos y lamentando derrotas de sus colores queridos.
En una casa de Haedo, ya clandestinos, comienza el drama. Hasta allí llegan las fuerzas represivas luego de ubicar y secuestrar al hermano de José, a su cuñada embarazada y a su padre. A pesar de que ninguno de los tres tiene militancia política, los llevan a Orletti y los torturan salvajemente hasta que logran la dirección que necesitan.
Cuando llega la patota, en la casa están la mamá de Norma con sus dos nietas pequeñas, hijas de Norma y de José. Interrogan y golpean a la abuela, mientras esperan la llegada de la pareja.
La que llega primero es Norma, la reducen a golpes y algunos se van con ella a Orletti, mientras los otros se quedan esperando a José, que vuelve por la noche y se traba en una pelea con los asesinos hasta que, entre cuatro, logran dominarlo y meterlo en el baúl de un auto.
Cuando José llega a Orletti ya están ahí su padre, su hermano, su cuñada y su mujer, que cuelga de una viga del techo, en la planta alta de ese taller que es una sucursal del infierno. Alcanza a ver a su padre tirado en un rincón, destruido por las torturas, y oye los quejidos de su hermano en otra celda cercana de la misma planta.
Los torturadores se ensañan con Norma que, colgada y lastimada, ve también a sus familiares agonizar en Orletti. Hasta que se hace la hora de cenar y los asesinos, hambrientos, deciden hacer una pausa.
Tienden la mesa en otro cuarto, casi al lado suyo, comen, toman mucho vino y de vez en cuando alguno se acerca a castigarla. Escucha sus risas, sus voces, sus gritos de borrachos, hasta que no oye nada más, sólo los ronquidos de las bestias durmiendo su borrachera.
Norma siente las ataduras flojas en sus muñecas y se decide. Está jugada. Con sus últimas fuerzas tira, se desata y cae al suelo. Alcanza las llaves de las esposas que cuelgan de un gancho en la pared y busca a su marido. Lo encuentra, lo libera y los dos toman las armas que los borrachos dejaron apoyadas en una columna. Hay un fusil y una ametralladora que ella no sabe manejar pero José sí.
Tira a ciegas la primera ráfaga de FAL y sacude la cortina de arpillera que hace de puerta de la sala donde duermen sus captores. Tira dos, tres ráfagas y se le traba el fusil. No importa, hay que escapar, deja el FAL y sigue tirando con la ametralladora. Los guardias vuelcan una mesa y se protegen detrás de ella. No se atreven ni a asomarse. José se acerca a su padre, pero el hombre no puede  moverse: “Vayansé ustedes chicos, por favor vayansé”, ruega, casi le ordena su papá. El hermano está inconsciente y a su cuñada no la encuentra. Mientras sigue disparando la metralleta libera a otro compañero que prefiere no sumarse a la acción. Norma se escuda en su marido, pero una bala le atraviesa el hombro. Los dos desnudos bajan por la escalera. Otra ráfaga y la huida desesperada de un guardián les muestra la puerta de salida que no podían ubicar. Con las fuerzas que les quedan salen a la calle. Enfrente están las vías del Sarmiento, las cruzan justo antes de que pase un tren que detiene al resto de la patota. El tren los separa y les da los segundos necesarios. Doblan por Emilio Lamarca y a mitad de cuadra encuentran un camión de una empresa de entregas postales. Le sacan las llaves al chofer, que no opone resistencia frente a esos a dos fantasmas sangrantes, y se van. Se van. Se van.
Son las ocho de la mañana del 3 de noviembre de 1976 y acaban de escaparse del infierno. 
José lleva a Norma a un refugio seguro donde curan sus heridas y luego prepara el regreso, junto a un grupo de compañeros, para copar Orletti y liberar a los que allí quedaron. Pero llegan tarde. La banda de Paladino y sus secuaces desmantelan el chupadero al día siguiente de la fuga.
Las marcas de las balas pueden verse hasta hoy en las paredes de Orletti. Los guías cuentan la historia de la fuga a quienes visitan ese centro clandestino de detención, convertido en Museo de la Memoria, y los vecinos de esa cuadra de Floresta también evocan aquella mañana de noviembre, cuando los despertaron los tiros y vieron a una pareja cruzar desnudos y heridos las vías del Sarmiento.
Norma sobrevivió y delegó en ellos el recuerdo de esta historia. José murió en 1978 en Nicaragua, luchando junto a las tropas sandinistas.


ANRed

24 de marzo de 2017

"Es evidente que las acciones del gobierno intentan borrar en nuestra conciencia colectiva lo que significó el genocidio"


Claudia Korol, principal referente de Pañuelos en Rebeldía quienes también participan del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia. Habló con ANCAP en el contexto del próximo 24 de marzo reflexionando el significado de esta fecha histórica. Por Redacción ANCAP

¿Cómo ves el panorama en tema de derechos humanos y violencia institucional de cara a un nuevo aniversario del último golpe cívico militar?
Es una marcha que se va a hacer en un contexto en que las mujeres, los maestros, los trabajadores, están saliendo a la calle a luchar por el conjunto de los derechos. Yo creo que esto va a marcar la jornada del 24 de marzo donde la posibilidad de enfrentar las políticas del gobierno nacional y muchos temas que nos están haciendo retroceder en nuestros logros y conquistas del pueblo. En el campo de los derechos humanos y de la memoria, es evidente las acciones de gobierno para intentar borrar de nuestra conciencia colectiva lo que significó el genocidio, poniendo en dudas desde las cifras de desaparecidos, hasta las organizaciones de luchadores y luchadoras que han sabido llevar históricamente esta batalla por memoria, verdad y justicia, pero también es evidente que se está buscando avanzar en nuevos niveles de represión, de criminalización tanto de la pobreza como de la protesta, la judicialización de las luchas y esto genera una tensión muy fuerte con los sectores populares. Yo creo que este 24 de marzo tiene esa disputa: hasta donde podamos, desde el campo popular, poner límites a las políticas represivas, conservadores y liberal.
¿Crees que es un buen momento para la unidad de los organismos de los derechos humanos?
Estamos a pocos días, yo no sé si se logrará una única marcha, pero sí creo que vamos a lograr como todas estas jornadas estar todos y todas los que enfrentamos las políticas de este gobierno, en la calle, más o menos articulados entre nosotros en relación a las consignas y demandas. Creo que memoria, verdad y justicia está organizando la movilización y seguramente van a haber momentos de cruce, de encuentros. También hay temas que todavía no han sido saldados que tal vez exijan más dialogo con debates, pero lo que a mí me parece fundamental es que vamos a estar muy movilizados, va a ser hasta difícil diferencia una marcha de las otras, incluso quien entra primero, quien entra después. Hay un desborde en las estructuras organizativas previas en cada una de las marchas que estamos viviendo, estoy pensando la marcha que se hizo el 8 de marzo, la de hoy (22/03) de los docentes, todas fueron desbordes, en términos de movilización, de capacidad organizativa y de capacidad de convocatoria. Yo creo que se viene en esa línea de acumulación de lucha y de cansancio frente a las políticas de gobierno y también cansancio en relación al sectarismo que puede haber de distintas direcciones de organizaciones políticas, sociales o sindicales. Ojala que el centro no sea la confrontación entre todos los que estemos movilizados, sino que el centro sea realmente una gran acción contra las políticas de la derecha militar, civil y religiosa que están en nuestro país y en el continente.
¿Cómo ves el rol de los medios con el tema de derechos humanos y con que se quiere volver a imponer la teoría de los dos demonios?
Yo creo que el rol de los medios ha sido y sigue siendo nefasto, por un lado están lo que han sido las violencias y las violaciones de los derechos humanos cotidianas contras los sectores más empobrecidos. También en relación a instaurar relatos que legitimen políticas como la teoría de los dos demonios o también como la idea de que no fueron 30mil los desaparecidos o que las políticas de derechos humanos son maniobras de algunos sectores para sacar ventaja. Todo esto tan nefasto, tan perverso no podría existir si no hubiera grandes medios masivos de incomunicación que están trabajando para eso, así que yo creo que por un lado hay una cantidad de periodistas que en algunos casos han podido reaccionar y se han revelado ante eso y es importante que lo estén haciendo o también drama de la comunicación popular, comunitaria y alternativa que hemos ido creando desde abajo desde nuestros propios medios y desde la pedagogía de la comunicación popular que es imprescindible para desbaratar esos argumentos y esas lógicas y para recuperar la verdad que es una de las demandas que nosotras y nosotros estamos sosteniendo junta con la memoria y la justicia.


24 de marzo: Por una Argentina sin hambre ni explotación – 30mil veces venceremos


Declaración de Poder Popular – Corriente de izquierda
Por una Argentina sin Hambre ni Explotación: ¡30.000 VECES VENCEREMOS!

24 de marzo de 2017. Se cumplen 41 años de la dictadura genocida en nuestro país. El golpe ejecutado por la Junta Militar al mando de Videla implementó el terrorismo de Estado dejando un saldo de 30.000 compañeras y compañeros detenidos-desaparecidos. La combatividad de la clase trabajadora de los años ´60 y ´70, que avanzaba en la conquista de su propio proyecto de sociedad, rebasó los intentos de la clase dominante de frenar este proceso con el Gran Acuerdo Nacional en 1971 primero, y luego con la Alianza Anticomunista Argentina (AAA) de López Rega e Isabel Perón en 1974. La burguesía local era fiel al imperialismo yanqui que preparaba su avanzada estratégica con la implementación del neoliberalismo en el tercer mundo, y para ello debían frenar el auge de masas que se profundizaba luego del Cordobazo y liquidar a la vanguardia organizada de la clase trabajadora y el pueblo, que resistía y sembraba entre las masas la convicción de una revolución socialista en Argentina.

Entonces la dictadura formó parte de un plan continental dirigido por EEUU, necesario para la reconversión capitalista que daría nuevo impulso a la sobreexplotación y acumulación ampliada de capital, y a su vez implicó un plan sistemático de exterminio encabezado por la CIA junto a los gobiernos títeres para frenar la oleada revolucionaria que se expandía en toda Latinoamérica, inspirada en el ejemplo de la revolución cubana, faro de todos los luchadores del continente y el mundo que se lanzaban a procesos de liberación nacional y social.

Pese a la campaña de las clases dominantes y sus medios masivos que intentaron engañar al pueblo con la “teoría de los dos demonios” o la lucha contra la subversión, el rechazo al genocidio es masivo y cada vez somos más los y las jóvenes trabajadores/as que retomamos la lucha por una sociedad nueva, sin hambre ni explotación. Nuestros 30.000 desaparecidos no eran terroristas, eran revolucionarios que haciéndose carne de los más nobles ideales se lanzaron a la construcción de la patria socialista.

La resistencia y la lucha nunca cesaron. Así lo demuestran las organizaciones de DDHH y anti-represivas que desde la dictadura a esta parte siguen denunciando a los genocidas y construyendo la memoria histórica de la clase trabajadora argentina. También lo demostraron importantes sectores de trabajadores durante los ´80 y ´90, entre ellos las y los docentes defendiendo la educación pública, y los movimientos de desocupados desde mediados de los ´90, luchando por trabajo digno con la perspectiva del cambio social.

Los Derechos Humanos son una conquista del pueblo

Con la rebelión del 2001, la clase trabajadora y los sectores populares hicieron caer el gobierno de De La Rúa y obligaron a las clases dominantes y sus partidos tradicionales a buscar una salida a la crisis: un período de concesiones para neutralizar el espíritu combativo del pueblo, recomponer la imagen de los partidos tradicionales y lograr la estabilidad del sistema político de los ricos. La recomposición del status quo capitalista en el país fue asumida por el kirchnerismo, que haciendo pasar por propias muchas reivindicaciones del pueblo se autoproclamó “gobierno de los Derechos Humanos”, confundiendo a muchas organizaciones y sectores del pueblo trabajador.

A pesar de políticas parciales como el apoyo a Madres y Abuelas en la búsqueda de nietos apropiados y de los juicios aislados a algunos genocidas, el kirchnerismo tuvo profundas inconsecuencias con los Derechos Humanos: la creación en 2004 de la Agencia Federal de Investigaciones en reemplazo de la entonces SIDE; la omisión ante la desaparición de Julio López en el 2006 durante el juicio al Circuito Camps; la política de criminalización de la protesta que se expresó en los 6.000 procesados, cientos de detenidos y más de 100 presos por luchar; la aplicación del Proyecto X de Gendarmería con el que hizo espionaje a muchos conflictos obreros y a todas las organizaciones de la izquierda y el campo popular; la tercerización de la represión a través de patotas como la que asesinó a Mariano Ferreyra; las leyes antiterroristas que facilitaron detenciones arbitrarias y condenas injustas a muchos luchadores populares; y ni hablar de la designación como Jefe del Ejército de César Milani, reconocido genocida de la dictadura que recientemente fue detenido por secuestros y torturas en 1976 y por enriquecimiento ilícito.

Con estas evidencias, decimos que las banderas de los Derechos Humanos no son de ningún gobierno, le pertenecen a las y los luchadores y el conjunto del pueblo.

La derecha arremete contra los 30.000 y plantea la reconciliación

El gobierno de Cambiemos ha dado desde el inicio claras demostraciones de su ideología reaccionaria: la reivindicación de dictadores como Onganía, Videla y Galtieri en la web de la Casa Rosada; la prepotente visita de Obama a nuestro país el 24 de marzo de 2016; la celebración del Día del Ejército en el Colegio Militar, donde prometió aumento de salarios para los uniformados y el abandono de “enfrentamientos y divisiones”; el decreto que concede a las FFAA mayores atribuciones a la hora de determinar ascensos, traslados, designaciones y premios, que desde la vuelta a la democracia dependían del Ministerio de Defensa; el fallido intento de mover el feriado del 24 de marzo de este año; y las declaraciones polémicas de Macri, Germán Garavano, y Darío Lopérfido, quienes con distintas palabras se refirieron al terrorismo de Estado como “guerra sucia” y pusieron en duda la cantidad de detenidos-desaparecidos, volviendo a poner sobre el tapete la teoría de los dos demonios y una posición ideológica que niega el genocidio y justifica a los represores y torturadores.

El gobierno de Cambiemos impulsa una nueva “reconciliación histórica”, yendo en contra de nuestra consigna “Ni olvido, ni perdón” y reivindicando por lo bajo a la dictadura, sin mencionar el encubrimiento a los representantes de la jerarquía eclesiástica y el empresariado que apoyaron el golpe, del que el clan Macri forma parte.

La movilización del 24 de marzo significa una nueva demostración de fuerzas del pueblo argentino en contra de la avanzada empresarial, luego de las grandes movilizaciones de la clase trabajadora y el movimiento de mujeres en las últimas semanas. Es un nuevo escenario donde juntamos fuerzas para frenar este ataque que pone en juego la verdad y la memoria respecto de la dictadura contrarrevolucionaria que interrumpió la realización del proyecto de nuestros 30.000 compañeros y compañeras, por el que hoy somos nosotros y nosotras quienes seguimos luchando.

SON 30.000 – FUE GENOCIDIO
¡30 mil compañeras y compañeros detenidos-desaparecidos, presentes!
¡Cárcel común y perpetua para los genocidas!
¡Aparición con vida de Julio López!
¡Libertad a Milagro Sala y todos los presos políticos!
¡Basta de represión, gatillo fácil y espionaje!
Marcha con Poder Popular: concentramos a las 15:00 en Av. De Mayo y Salta

Poder Popular – Corriente de izquierda


Partido Revolucionario de los Trabajadores
PRT – Argentina. Por la Revolución Socialista

Convocatoria del PRT a la movilización del 24 de Marzo / 13 hs.

14/03/2017
Por PRT Argentina
 

URUGUAY

Ex militares buscan un puesto político en el Partido Colorado

Dos ex militares que formaron parte de gobiernos del Frente Amplio pretenden ingresar de nuevo a la política, pero esta vez apostando al Partido Colorado.

General Pedro Aguerre / mdn.gub.uy
General Pedro Aguerre / mdn.gub.uy
Los colorados vienen de perder tres elecciones nacionales consecutivas. Su interna se reorganiza para luchar por el Poder Ejecutivo en las próximas elecciones de 2020, pero de una forma más bien particular: algunos legisladores se movieron a las filas del Partido de la Gente, a la vez que nuevas formaciones coloradas internas competirán entre sí.
En esta reorganización, el partido recibe nuevas anexiones, algunas de ellas de militares de alto rango, como la del general del ejército Pedro Aguerre y el general de la fuerza aérea José Bonilla, quienes ocuparon esos altos cargos durante las presidencias frenteamplistas de Tabaré Vázquez y José Mujica.
Bonilla fue comandante de las FFAA durante la primera administración Vázquez, y después fue íntimo de Mujica, y en su gobierno ocupó el cargo de Jefe del Estado Mayor de la Defensa, a su vez que coordinó la Inteligencia del Estado, organismo que mira por la defensa del país.
Aguerre fue comandante en jefe del Ejército entre septiembre de 2011 y enero de 2014 y tiene grado de general de cuatro estrellas de la fuerza de tierra. Vivió años complicados en su carrera, siendo su padre -también llamado Pedro- uno de los oficiales que en el año ’73 se opuso al golpe de Estado que instauró la dictadura.

Militares en la historia política

José Bonilla / mdn.gub.uy
José Bonilla / mdn.gub.uy
Aunque hoy en día las adhesiones militares son más bien raras, han sido comunes en la historia de la política uruguaya. Yendo a los orígenes mismos del Partido Colorado, este fue fundado por el General Fructuoso Rivera alrededor del año 1825. El Partido Blanco también se fundó por aquellas fechas, creado por los seguidores del presidente Manuel Oribe.
En la batalla de Carpintería surgen los colores de las divisas que posteriormente identifican a cada grupo político. Partido Blanco, partidarios de Oribe y Colorado los de Rivera. Lo cual conforma un bipartidismo que dura hasta fines del siglo XX.
Desde 1865 hasta 1959, los colorados ocuparon de forma sucesiva la Presidencia de la República, representando los intereses populares urbanos de Montevideo, la apertura a lo europeo y a los grupos de inmigrantes. En la otra vereda, los blancos tenían su base en el medio rural del interior y los intereses de los terratenientes agrícolas y ganaderos.